Tres estudiantes del campus de programación ‘42’ cuentan qué les motivó a entrar y qué han encontrado.
3 estudiantes nos cuentan cómo los campus de programación ’42’ ofrecen, a través de una metodología innovadora, formación gratuita, de calidad y que no requiere de conocimientos previos.
No es una exageración: hay profesiones donde la tasa de empleabilidad es prácticamente del 100%. Son los trabajos que dan forma al presente, transversales a cualquier sector. Algunos de ellos son desarrollador de software, profesional técnico TIC, digital project manager, administrador de sistemas, desarrollador full stack…
Nuestros campus de programación 42 nacen a partir de esa observación y con el objetivo de formar a personas en las profesiones que el mercado va a necesitar cubrir sí o sí en los próximos años.
‘42’ es un campus de programación donde se rompen los esquemas y paradigmas tradicionales con una metodología basada en el aprendizaje entre pares y la gamificación, una filosofía centrada en “aprender a aprender” y espacios donde se fomenta la creatividad, el esfuerzo, la superación y el trabajo en equipo. Y, además, de forma totalmente gratuita.
3 ejemplos de una pasión convertida en profesión
Pilar Márquez, 44 años, “Cuando la realidad supera a la ficción”
Pilar Márquez (Cádiz) es estudiante del campus de programación ‘42’ de Málaga y está a pocos días de cumplir 45 años. En su vida se han cruzado la Filología Inglesa, un Máster en Gestión de la Comunicación en las Organizaciones y hasta una editorial independiente especializada en ciencia ficción, fantasía y terror que ha sido su principal ocupación desde entonces. Se ha formado en corrección ortotipográfica y de estilo, y trabaja en paralelo como freelance, realizando correcciones para otras editoriales y entidades.
En esas, decidió reorientar su carrera hacia un sector, el tecnológico, que siempre le había atraído y al que, dada su edad, consideraba muy difícil poder incorporarse. A ello se sumó el método ‘42’, que le encajaba con su personalidad curiosa y autodidacta: “ Lo que más valoro es que se nos trate como personas adultas que se responsabilizan de su trabajo y su avance”.
Pilar entró en el campus con un objetivo muy concreto: dominar la programación, corrección, edición, gestión cultural y ciberseguridad. “ Me gusta ser todoterreno y poder aportar, humildemente, lo que he ido aprendiendo en todos mis años de experiencia junto a los nuevos conocimientos que estoy adquiriendo en programación”, dice.
Karol Huertas, 29 años, De 0 a 100
Karol Huertas (Ecuador) tiene 29 años y ningún tipo de formación académica. Actualmente trabaja como administrativa, pero espera que eso cambie porque “me encanta la programación y quiero hacer de ello mi profesión”.
Karol asistió a un open day en el campus de programación ‘42’ de Madrid con el deseo de dar un cambio radical a su vida. “Salí enamorada de la metodología y de todo el potencial que ofrecía el campus”, asegura. Desde entonces, su curva de adquisición de conocimiento pasó de 0 a 100 y aprendió a aprender.
Su próximos pasos apuntan hacia la web3: “Me parece un ecosistema increíble del que espero poder formar parte muy pronto, lo que no sería posible sin la flexibilidad que brinda el campus a sus estudiantes: sin horarios, profesores y donde yo marco mi propio ritmo”.
Jokin Aizpuru, 19 años, Una alternativa al modelo de enseñanza tradicional
Jokin Aizpuru (San Sebastián), de 19 años, no tenía muy claro qué se iba a encontrar en el campus de Urduliz. Había realizado el bachillerato de Ciencias y Tecnología y le atrajo ver que en la web del campus ponía que la metodología y enseñanza eran diferentes: “Se me hizo muy extraño pensar en ello; no llegué a desarrollar una imagen de cómo fluirían las cosas”.
Jokin se apuntó porque no le gustaba el modelo de enseñanza tradicional y porque sus padres le animaron a que decidiera por sí mismo sus siguientes pasos. Allí encontró un ambiente muy saludable, compañerismo, libertad y oportunidades: “Creo que nunca habría encontrado el mismo ambiente si hubiera elegido otro tipo de formación”. Desde entonces, animado por la flexibilidad que ha descubierto en ‘42’, un proyecto de futuro comienza a tomar forma: “Quiero abrir mi propio negocio”.
¿Tú también quieres formar parte de ‘42’? Visita su web y fórmate en las profesiones que demanda el mercado y en soft skills como liderazgo, comunicación y trabajo en equipo.
