Informe Anual
20 19
Comprometidos con un mundo digital, justo e inclusivo
Creemos en un mundo con igualdad de oportunidades
Para que nadie se quede atrás
Carta del Presidente
"La educación es la mayor palanca para la autonomía de las personas"
Hace dos décadas, Fundación Telefónica echó a andar con una certeza y un propósito. La certeza era que las tecnologías de la información y el conocimiento iban a transformar la sociedad de una forma más rápida y más intensa que en ningún otro periodo de la historia. A partir de esta convicción, nuestro propósito fue trabajar para hacer un mundo mejor y que el mayor número de personas pudieran participar en esa transformación, para que nadie quedara al margen. Y, también, contribuir al debate de ideas sobre las implicaciones sociales, culturales o económicas de esos cambios.
Veinte años después, podemos decir que aquel pronóstico se ha visto ampliamente superado por la realidad: la revolución digital está presente en todos los ámbitos de la vida, ha modificado la economía, el mundo del trabajo, la creatividad y, por supuesto, la forma en que nos relacionamos con los demás. Y nuestra experiencia en todo este tiempo de intensa labor nos dice que aquel compromiso inicial cada vez está más justificado: que la educación es la mayor palanca para la autonomía de las personas, que es necesario adaptar su formación a los nuevos perfiles que reclama el mercado laboral, y que, hoy más que nunca, la solidaridad es uno de los indicadores de una sociedad sana.
La memoria que ahora presentamos muestra la actividad de Fundación Telefónica a lo largo de 2019: Proyectos de formación digital para niños y niñas de entornos vulnerables, iniciativas para mejorar la empleabilidad, debates, exposiciones, y acciones de voluntariado. Este es el balance de un año, digamos, “normal”, pero se ha realizado en una situación excepcional, y ve la luz en un momento cargado de incertidumbres. Es la hora de mirar al futuro y extraer enseñanzas, aunque en estos meses de crisis se han confirmado algunas cosas importantes. La digitalización de nuestra sociedad ha sido clave para mantener la actividad laboral de millones de personas, y va a serlo para encontrar las respuestas a la pandemia o para monitorizar el proceso de vuelta a la normalidad. Además, hemos comprobado el poder emancipador de la cultura y la fuerza del espíritu solidario.
En suma, la crisis de la COVID-19, que ha puesto en cuestión muchas certezas, ha confirmado nuevamente la oportunidad de nuestros objetivos. Por eso, esta memoria es una declaración de orgullo por un trabajo hecho con entusiasmo y esfuerzo, y, también, la renovación de aquel compromiso que suscribimos hace más de 20 años. Porque estamos convencidos de que en el nuevo tiempo que ahora se abre, instituciones como Fundación Telefónica van a ser aún más necesarias.