Firma invitada: Juan Pedro Benítez, Chief Digital Innovation Officer de Asociación Española Contra el Cáncer
Juan Pedro Benítez, de la Asociación Española Contra el Cáncer, profundiza en alguno de los elementos más relevantes de ‘Lola’, el innovador Asistente de Voz Virtual para dejar de fumar que fue presentado en el Congreso del Tercer Sector.
- Una organización con el histórico de la Asociación Española Contra el Cáncer se diría que se va adaptando a los tiempos para seguir siendo relevante para el servicio que da, pero en este caso habéis dado un salto muy significativo utilizando la tecnología como palanca. Juan Pedro, ¿Cómo surge el proyecto del Asistente virtual de voz para dejar de fumar?
La Asociación inició el camino de la transformación digital hace no muchos años, y lo está transitando de manera acelerada. Desde entonces, venimos dotando de mejores infraestructuras de conectividad, sistemas de información y aplicaciones de colaboración a nuestros empleados. También comenzamos la digitalización de la relación con nuestros beneficiarios y, más recientemente, la creación de nuevas aplicaciones digitales que les aporten valor.
De ahí surgió la idea de crear el área de innovación digital que yo dirijo. Uno de nuestros objetivos es validar soluciones digitales que mejoren la calidad de vida de las personas con cáncer y sus familiares, o que ayuden a prevenir la enfermedad. Nuestra metodología pone mucho énfasis en partir de las necesidades, pero en el caso del Asistente Virtual de Voz (AVV) hicimos una excepción y partimos de la tecnología para luego buscar casos de uso.
En los programas de deshabituación tabáquica vimos una buena oportunidad no solo para cubrir una necesidad sino también para depurar la nueva metodología de innovación que habíamos diseñado y para probar dos tecnologías que pensamos tienen mucho potencial, el procesado natural del lenguaje y la inteligencia artificial.
- Se habla de que a la hora de innovar nunca se cuentan los fracasos y sólo se habla del éxito que suele ser el final ¿Cuáles dirías que han sido los factores clave para dar con el éxito en este caso? ¿Qué hicisteis diferente?
Diría que ha habido tres factores clave en los buenos resultados obtenidos. En primer lugar, la solución digital que seleccionamos estaba bastante madura, y la colaboración con el equipo de la startup (TUCUVI) fue fantástica.
También ha sido importante la comunicación muy fluida con los diferentes equipos y, muy especialmente, con quienes participaron en el piloto, estando muy cerca de ellos, escuchándolos y ayudándoles en todo lo que fueran necesitando.
Por último, hablaría del proceso, que fue quizás lo que además hicimos más diferentemente. Veníamos de crear desde cero una metodología de innovación para validar nuevas soluciones digitales y éste fue nuestro primer proyecto en el que la aplicábamos de principio a fin. Pusimos mucho foco de negocio, en el sentido de anticipar al máximo las necesidades de una eventual puesta en producción y de validar todos los aspectos de negocio para que aquella resultase exitosa (aspectos funcionales, técnicos, operativos y de satisfacción de usuario, costes, requisitos legales…).
El verdadero éxito de este proyecto es haber podido depurar nuestra metodología y la forma de colaborar, así como validar una solución que podamos adoptar en otros casos de uso de alto impacto.
- En el Congreso se mencionaba la tecnología como una manera de humanizar la intervención social, justo lo contrario de lo que muchas veces se piensa ¿Cuál es el feedback que estáis recibiendo de los usuarios/pacientes?
La valoración y los comentarios, tanto de los profesionales como de los participantes en el programa de deshabituación, han sido muy positivos. Aunque el número de personas involucradas ha sido todavía pequeño, la tendencia es muy clara.
La satisfacción media de los participantes con ‘Lola’ (el AVV) fue de 3.32 sobre 4, valorando especialmente la mejora en la adherencia al protocolo de deshabituación y las alertas detectadas en situaciones de riesgo de caída. Comentarios de participantes como “Qué maja es Lola, ¡me ha llamado esta mañana para ver cómo estaba y si estaba siguiendo las recomendaciones!” hablan por sí solos de la buena acogida que ha tenido el Asistente.
- Desde el área de Innovación Digital que diriges, ¿en qué otras líneas de trabajo estáis poniendo atención en estos momentos?
Desde hace ahora dos años y coincidiendo con mi incorporación, estamos trabajando con un enfoque de innovación abierta, lo cual es un cambio de paradigma muy importante para nuestra organización, que no se logra implantar de la noche a la mañana.
Este enfoque implica considerar la colaboración con terceros como elemento central de nuestra nueva forma de hacer innovación, evolucionando de tener relaciones cliente-proveedor a relaciones entre colaboradores con un objetivo común.
Una de nuestras líneas de trabajo más activas que tenemos ahora mismo es la búsqueda de partners que quieran sumarse a nuestros esfuerzos en la mejora de la calidad de vida de las personas con cáncer y sus familias. Con ellos queremos desarrollar nuestros programas de innovación abierta para la identificación de soluciones digitales. En lo particular y más inmediato, nuestro objetivo es lanzar en breve una primera edición que buscará soluciones para cubrir necesidades emocionales.
- ¿Cómo te gustaría que se viera a la Asociación en 5 años? Danos un titular y por qué.
En 5 años aspiraría a que nuestra Asociación se conozca por su capacidad de acompañar a las personas con cáncer y sus familiares en su día a día, independientemente de donde se encuentren, cubriendo todas sus necesidades psicológicas, sociales y físicas, y llegando cada vez a más personas para que nadie se quede atrás.
Tenemos el conocimiento, la experiencia y la confianza de la sociedad, y estamos dando los pasos necesarios para que, gracias a la innovación abierta, la colaboración con terceros y el canal digital, podamos hacerlo de forma masiva y universal, multiplicando el impacto de nuestra misión.
- ¿Cuál sería una frase para definir tu visión sobre la tecnología aplicada al mundo social?
Si de verdad queremos generar impacto social, utilicemos la tecnología a escala. Está disponible y sobradamente probada. Cambiemos el cómo, no el para qué. Nos urge.
- Para cerrar, déjanos algún dato personal que quieras compartir, un libro, una canción, un lugar que te inspire.
Un libro: ‘El hombre en busca de sentido’, de Viktor Frankl. Vivir el presente y la compasión, dos ingredientes imprescindibles para navegar por la vida, por una vida mejor.
Una canción: ‘Un cuento para mi niño’, de Lole y Manuel. Un homenaje a mi padre.
Un lugar que me inspire: cualquier playa virgen o lugar de alta montaña. La naturaleza me conecta con mi esencia.
Una receta: Espetos de sardinas. ¡Lo más! Os hago unos cuando queráis.
Un deseo: jugar unos puntitos contra Rafa Nadal.