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Con una maleta cargada de ilusión y solidaridad, así es como comienzan sus vacaciones Mariana, Pablo, Belén, Sergio, Juan Esteban y Camila. Estos son algunos de los 258 voluntarios de Telefónica que entre junio y septiembre participan en las Vacaciones Solidarias 2018. Una iniciativa organizada anualmente por Fundación Telefónica que permite a los empleados del Grupo Telefónica dedicar sus vacaciones a proyectos solidarios con colectivos vulnerables.
Este no es un año cualquiera. Los voluntarios seleccionados, entre empleados en activo, prejubilados y jubilados, procedentes de 21 países, formarán parte de las Vacaciones Solidarias más internacionales de la historia del programa: un total de 10 países de distintos lugares del mundo, tanto en España como en América Latina, donde está presente Fundación Telefónica, así como regiones de África y Asia donde ya desarrolla su labor educativa Fundación ProFuturo.
Todos los proyectos tienen el Voluntariado Digital como eje conductor: actividades formativas y lúdico-educativas con niños, adolescentes, docentes y miembros de la comunidad en el manejo de las herramientas digitales con fines educativos y en su uso responsable, beneficiando a cerca de 1.900 personas. Para ello, los voluntarios reciben formación previa en las competencias y herramientas digitales que van a utilizar.
En los últimos tres años se han duplicado las solicitudes para las Vacaciones Solidarias Internacionales. Carmen Morenés, responsable global del Programa Voluntarios Telefónica, explica que “cada año más empleados quieren dedicar tiempo de sus vacaciones ayudando a las personas que más lo necesitan”.
Recorrer el mundo ayudando
Un verano en contacto con una escuela a orillas del Amazonas en Manaos (Brasil), la comunidad Talipanan Mangyan en Mindoro (Filipinas), la institución educativa y de acogida en el Valle de Conocoto (Ecuador) o los niños del área rural de Mafinga (Tanzania). Estos lugares recibirán en los próximos meses un total de 140 voluntarios de Telefónica que colaborarán en 10 proyectos solidarios en países de América Latina (Colombia, Perú, Brasil, Chile, Panamá, Ecuador, Argentina) y, por primera vez en la historia del programa, en Tanzania y Filipinas.
Los voluntarios darán apoyo a los programas educativos de Fundación Telefónica, principalmente a ProFuturo, la iniciativa de Fundación Telefónica y Fundación Bancaria ”la Caixa” que tiene por objetivo proporcionar educación digital de calidad a niños y niñas de los entornos más vulnerables. Talleres digitales de programación con Scratch, robótica o ciberseguridad, formación a docentes, mejora de infraestructuras y gestión de escuelas o digitalización del catálogo de la biblioteca, serán algunas de las actividades que se desarrollarán entre julio y septiembre.
Vacaciones Solidarias Internacionales arrancaron hace 14 años de manera pionera dentro del voluntariado corporativo y desde entonces alrededor de 1.200 voluntarios han viajado por todo el mundo ayudando a los que más lo necesitan a través de actividades formativas y lúdico educativas con niños y miembros de las comunidades en las que se desarrollan los proyectos.
“Es una oportunidad para vivir una experiencia solidaria única y trabajar junto a otros compañeros que comparten tus ilusiones”
Carmen Morenes Directora general de Fundación Telefónica
Unas vacaciones solidarias nacionales en familia
En España, también hay oportunidad de pasar un verano diferente. Talleres de robótica e impresión 3D, instalación de cámaras de fototrampeo o yincanas de códigos QRson algunas de las actividades que se organizan en las Vacaciones Solidarias 2018, en Valencia, Guadalajara, Santiago de Compostela, Sevilla y Madrid, que congregan a más de 100 voluntarios de Telefónica. Como novedad este año, jóvenes de entre 13 y 17 años participan como voluntarios junto con sus padres en uno de los campamentos tecnológicos, junto con niños y jóvenes en riesgo de exclusión social.
Belén Rey es una de las voluntarias de Telefónica que ha participado en el primero de los proyectos de Vacaciones Solidarias 2018. Se trata de un campamento tecnológico con jóvenes en riesgo de exclusión social, organizado junto con la Fundación Amigó en Valencia. A Belén le sorprende positivamente que los chavales le digan que “gracias al campamento les gusta la robótica y la ciencia puede ser divertida”. El rol de los voluntarios ha sido, principalmente, dar apoyo en los talleres de robótica y fomentar la autodeterminación con actividades de inclusión educativa. “Intentamos crear un vínculo emocional con ellos y que sientan que aquí somos una familia”, concluye.
El proyecto de Vacaciones Solidarias España inició su andadura en 2011 y desde entonces han participado más de 500 voluntarios a través de actividades solidarias desarrolladas con colectivos que necesitan apoyo, como personas con discapacidad y/o enfermedad, en riesgo de exclusión, niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad, mayores, etc.